lunes, 16 de julio de 2012

My same




Hubo una cosa que debí hacer, cumplir realmente con el propósito de escribir en una libreta todo lo que se me pasase por la cabeza. Aprovechar esos momentos en los que la inspiración no dejaba de llenar mi mente de cosas que, al menos a mí, me parecían de provecho. Creo comprender ahora como se sentía ella. Quizás sea una coincidencia ya que hoy es su día o, quizás, nuestras vidas lleguen a tal punto de paralelismo que en algún momento esto tenía que ocurrir.

Y es que, a pesar de nuestras infinitas diferencias, opinamos lo mismo en muchos otros temas (con matices). En lo que estamos totalmente de acuerdo es en que queremos que la línea de la vida no se vuelva plana, ya no por si ésta termina sino por vivirla. 
Somos felices escuchando un hermoso tango cuando cae la noche. Solo queremos esa tranquilidad subcutánea, esa que te mantiene estable sin perder esas ondas de vitalidad que hacen el trajín del día a día, las épocas o todas esas circunstancias que nos acontecen en esta cercana distancia.

Somos felices paseando, tomando un helado de avellana de una sola bola y preguntándonos miles de cosas sobre el mundo y las personas. Queremos creer y sabemos que todo es muy simple pero hay que aliñarlo con magia.

Es entonces cuando me agarro a mi llavero de la M y echo a andar. Por las calles de Madrid, las de Granada... o las de cualquier sitio. Amiga, llevémonos nuestra libreta de azulejos.

sábado, 14 de julio de 2012

Fúcar

Mi pasado y mi presente en la misma mesa, al lado de la misma ventana, tomando el mismo café.












Quiero trazar una línea recta entre tantas curvas. De color azul.