sábado, 31 de diciembre de 2011

11

Es como tener una naranja partida en dos delante de ti.

Coges la primera mitad, la miras y ves la monda, dentro ya no queda nada. Entonces piensas en lo dulce que sabía y lo a gustito que te quedaste después de tomártela.

Más tarde, coges la segunda mitad, la miras y ves que quedan restos. Entonces piensas en lo ácida que estaba y en lo difícil que ha sido tomar la cantidad que pudiste.

Quizá podría definir así este año.

Ha sido un cógelo o déjalo y, creo, que he cogido todo lo que he querido. Si las consecuencias no fueron las mejores sí lo ha sido la intención y con eso me basta.

Por esta razón, no me deja mal sabor de boca sino todo lo contrario. Reflexionando ahora, veo los malos momentos insignificantes en comparación con los grandísimos momentos que he vivido y, sobre todo, con las personas que empiezan conmigo el nuevo año.
Es cuando me doy cuenta de que de la segunda mitad de la  naranja comienzan a caer gotas exprimiendo así lo que, una vez más, la vida me ha enseñado y valorando lo que tengo.


En este momento, ante mí, hay dos mondas vacías. 
Me he bebido 2.011 y no, no he dejado nada en el vaso.








lunes, 26 de diciembre de 2011

Del Punto A al Punto A

Hoy

Hay cosas que ahora no me puedes dar. 
Cosas que quiero, necesito.
No estoy en ese punto. Lo siento.
Aunque te quiero, tal y como eres; no cambiaría nada de ti.
"No eres tú, soy yo"; sí, reciclo el dicho.

Porque tú para mí lo tienes todo, pero no ahora.
Considéralo un paréntesis el cual no sabemos cuánto puede durar.
A veces, me arrepiento de lo que puedo llegar a pensar.

Pero no te preocupes. todos te admiran, presumo de ti. 
Eres el punto de partida. Eres el eterno retorno.


Fotografía: Santi Villamarín.






17 Diciembre 2.007 



"And sometimes you close your eyes... 



Bajo a la calle.
En la Avenida del Ejército siempre suele hacer viento,pero es viento coruñés entonces no importa.

No llueve y me apetece bajar andando. Recorro toda la avenida hasta La Palloza.
Al lado, el puerto.
Y como quien no quiere la cosa ya estoy en la plaza de Orense.
Atravieso la plaza de Lugo para llegar a la de Pontevedra, Eusebio da Guarda.

Me meto hacia San Andrés para llegar finalmente a Los Cantones.
Obelisco.
Calle Real, luces, María Pita, Ciudad Vieja.

Me animo a ir hasta la Dársena, al Castillo de San Antón y ya puestos ¿por qué no hasta la Torre de Hércules?
Allí está, tan bella y majestuosa como siempre, y también como siempre el viento es frío e imparable.
Pero da igual porque es viento coruñés.

Rodeo el Paseo Marítimo, Orzán, Rompeolas, Riazor.
Voy a acercarme al Millenium.
Una vez aquí me entran ganas de subir al Monte de San Pedro. Increíble.
La Coruña a mis pies.

Vuelvo por el estadio imaginándome los gritos de los Blues.
Estoy cansada, me apetece volver en bus.
Otra vez en la plaza de Orense, "qué mítico" venir a coger el 2 aquí.


Linares Rivas, Primo de Rivera, otra vez paso por La Palloza pero esta vez me dirijo a la fuente de Cuatro Caminos.
Es de noche ya, está iluminada.

Llego casi al final de General Sanjurjo,me bajo. O mejor, espero una parada y así puedo ir al mirador de Los Castros, mi barrio.
Otra gran vista de la ciudad, el mar.

Hace frío, me voy a casa.
El viento ha abierto la puerta del portal, como casi siempre.
Pero qué mas da, si total, es viento coruñés.Y no es un viento cualquiera, éste te hace volar en todos los sentidos...



Después de tantos días fuera me encanta no tener que hacer este recorrido sólo con la mente. "


martes, 20 de diciembre de 2011

09.10


'Reconocerse en este caso es la mejor opción.
Aunque dejarse llevar suene demasiado bien, muchas veces pensar contamina [una, dos, tres... mil veces]. Es solo un pequeño consejo.
Siempre algo en esta vida cambiante, todas esas cosas que he hecho.'



'Coruña.Madrid.Toledo.Milán.
Granada.Santiago.etc.'


Se han puesto de acuerdo; lo peor de uno y lo mejor de otro.

Casi nadie lo entenderá pero son simples matemáticas. Una progresión, por supuesto.